¿Qué son las 5 heridas de la infancia y cómo marcan nuestra alma desde los primeros años de vida?
Las 5 heridas de la infancia son patrones emocionales profundos que se forman en los primeros años de vida, generalmente como resultado de experiencias dolorosas con los padres, cuidadores u otras figuras significativas. Estas heridas se almacenan en el inconsciente y pueden influir en la personalidad, los vínculos afectivos, la autoestima y las decisiones a lo largo de toda la vida si no se sanan conscientemente. A continuación, se explica cada una con detalle:
1. Herida de Rechazo
Surge cuando el niño percibe que no es deseado o que su existencia no es aceptada. Puede originarse desde el embarazo o en los primeros años de vida cuando se le ignora, se le critica o se le hace sentir como una carga. Esta herida genera una personalidad evasiva, con miedo al contacto, dificultad para establecer relaciones estables y tendencia a huir de todo lo que implique apego emocional.
2. Herida de Abandono
Aparece cuando el niño siente la ausencia emocional o física de las figuras que deberían cuidarlo. Esto puede incluir negligencia, separación, desapego o falta de presencia emocional. Quienes sufren esta herida desarrollan una personalidad dependiente, con miedo a estar solos, necesidad constante de afecto y validación externa, y angustia ante el rechazo.
3. Herida de Humillación
Se origina cuando el niño es avergonzado, ridiculizado, juzgado o expuesto por sus necesidades corporales, emocionales o de expresión. También se relaciona con padres que lo controlan excesivamente. Esta herida da lugar a una personalidad masoquista, que se autocastiga, se somete y tiende a olvidarse de sí mismo para complacer a los demás, por temor a ser rechazado por su autenticidad.
4. Herida de Traición
Se forma cuando el niño siente que ha sido traicionado por uno de sus padres o figuras importantes, generalmente porque no cumplieron promesas o lo manipularon. Esta herida está asociada al control, la desconfianza y la necesidad de tener poder. Las personas con esta herida suelen desarrollar una personalidad fuerte, controladora y dominante para evitar volver a ser traicionadas.
5. Herida de Injusticia
Surge cuando el niño vive experiencias donde siente que ha sido tratado con rigidez, frialdad o exigencias excesivas sin tener en cuenta sus emociones o límites. Esto lo lleva a desconectarse de sus sentimientos, generar un carácter perfeccionista, rígido, exigente y frío como mecanismo de defensa ante la injusticia sufrida.
Estas heridas no son culpa del niño ni necesariamente del entorno, sino parte de una cadena transgeneracional que puede ser transformada a través de la conciencia, la sanación interior y el trabajo espiritual profundo.






Valoraciones
No hay valoraciones aún.